viernes, 14 de marzo de 2025

San Justino Mártir vs. Celso

LA APOLOGÍA DEL CRISTIANISMO CONTRA ÉL PAGANISMO FILOSÓFICO 

ORÍGENES DEL PENSAMIENTO:

San Justino Mártir, un filósofo convertido al cristianismo en el siglo II, defendió la fe cristiana utilizando la filosofía griega, argumentando que la razón y la fe podían armonizarse. 

Celso, un filósofo pagano del mismo período, escribió Discurso Verdadero, una crítica feroz al cristianismo, afirmando que era irracional y una amenaza para la sociedad romana.

Justino ve la filosofía como un puente a la fe; Celso la usa para refutarla.


CONOCIMIENTO Y VERDAD:

Para Justino, la verdad reside en Cristo y la filosofía es solo un medio para llegar a ella. 

Para Celso, la verdad está en la razón y en la tradición grecorromana, mientras que el cristianismo era un dogma irracional. 

Uno busca elevar la filosofía a la fe; el otro, defender la razón frente a la fe.


DIOS Y LA RELIGIÓN:

San Justino argumentaba que el cristianismo era la culminación de la filosofía y que los filósofos paganos, como Platón, habían vislumbrado a Dios sin conocerlo completamente.

Celso, en cambio, veía a los cristianos como fanáticos que rechazaban la razón y las tradiciones establecidas.

Uno ve la revelación como superior a la razón; el otro, la razón como el único camino a la verdad.


IMPACTO EN LA SOCIEDAD:

Justino escribió apologías para defender la fe cristiana frente al Imperio Romano y fue martirizado por su testimonio.

Celso influyó en la resistencia intelectual contra la expansión cristiana y su obra provocó respuestas de teólogos posteriores, como Orígenes. 

Uno murió por su fe; el otro, luchó por su filosofía.

Justino se convirtió en uno de los primeros apologistas cristianos y ayudó a establecer la relación entre filosofía y teología cristiana.

Celso representó la resistencia intelectual del paganismo frente al cristianismo naciente. 

Uno integró la filosofía con la fe; el otro, la usó para combatirla.

San Justino defendió la compatibilidad entre la fe cristiana y la filosofía, mientras Celso denunció al cristianismo como irracional y destructivo para la civilización. Un enfrentamiento clave en la historia del pensamiento religioso.






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